No quiero más lágrimas derramadas por ésto. No quiero más bronca por cómo mi cabeza -ya sea en su estado consciente o inconsciente- me afecta.
Y es así cómo ella tiembla, cómo su mundo tambalea.
Cuando de la cima resbala, cuando cae, cuando comienza a doler.
La fe, virtud que la alienta y levanta.
Sin embargo, pareciera que ellos quieren atarla. Cadenas de sueños que queman; hilos que la amarran: no por destreza sino por duda. Porque aunque no debería suceder así, ella lo repasa una y otra vez, hasta que su mente se cansa de conjeturas, hasta que decide ocultar sus pensamientos para no detener los latidos de su corazón.
1 comentario:
me encantó.. sobretodo la última frase..
si sabremos de eso..
love you soph!
Publicar un comentario